La arquitectura prehistórica estaba formada por
un conjunto de construcciones de grandes piedras(megalitos proviene del
griego: mega-grande, litos-piedra). Son grandes bloques de piedra sin tallar que
se encuentran enterradas en el terreno.
El menhir consiste en
una gran piedra hincada en el suelo en posición vertical.
El dolmen es una
construcción formada por varios menhires y una gran piedra colocada
horizontalmente sobre ellos.
El crómlech agrupa
varios menhires formando un círculo
La naveta es una
construcción con forma de nave invertida realizada con grandes bloques de
piedra. Se utilizaban como sepulcro colectivo.
La taula es un
monumento ceremonial formado por una piedra vertical y otra horizontal sobre
ella, parecido a una mesa, de ahí el nombre.
Conocemos cada uno de ellos: sus nombres, cómo se hacían, para qué servían, etc. |
El trabajo para construir
estos monumentos suponía un gran esfuerzo colectivo, largo y pesado (cada
piedra pesaba varias toneladas). Había que cortar la piedra, tallar lo bloques
para darles forma y medidas deseadas, transportar la piedras (generalmente se
hacía arrastrando la piedra sobre un rodillo hecho con troncos y sogas atados
entre sí) y preparar el terreno excavando grandes agujeros para introducir una
parte del bloque de piedra, después se volvía rellenar el agujero con tierra y
piedras en forma de cuña. Se necesitaban más de cien personas para este tipo de
construcciones.
Para obtener los bloques de
piedra aprovechaban las grietas, se encendían fuegos sobre ellas y después se
echaba agua fría para ensanchar las fisuras por la acción de los cambios de
temperatura. Luego se golpeaban con mazas de piedra, cuñas…., hasta que la
piedra se fragmentaba.
La gran piedra horizontal era
la más difícil de colocar. Para conseguirlo se cubría con tierra la zona en la
que estaban los menhires y se formaba una colina (se enterraban los menhires en
un montículo de tierra), se subí la gran piedra por la pendiente deslizándola
sobre los troncos de madera y tirando de las grandes sogas atadas a la piedra
hasta que quedaba colocada sobre los menhires enterrados, después se quitaba la
tierra y el monumento quedaba al aire.
Hay dólmenes y menhires
repartidos por toda Europa: en Italia, España, Portugal, Francia, Inglaterra…
Hay dólmenes muy bellos como el Dolmen de
la Roca de las Hadas y menhires colocados en hilera que son visitados por miles
de personas en Bretaña (Francia).
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